En los días previos a la boda de Michael (Scot Williams), un grupo de amigos un tanto cabrones deciden secuestrarle en broma, dándole el susto de su vida con la secreta intención de que acabe conduciendo el vehículo de huída en un robo a unos mafiosos muy chungos encabezados por Golden Pole, un Vinnie Jones muy cabreado. El caso es que en la escapada, este grupo de ingleses inconscientes y sus peligrosos perseguidores acaban en Lituania siendo golpeados por gitanos, prostitutas, borrachos, policías corruptos, maleantes, y demás personajes estrambóticos.
Redirected (Emilis Velyvis, 2014) es la película de humor más gamberra y divertida del año. Situación surrealista tras situación surrealista, el espectador nunca sabe lo que se va a encontrar en el siguiente plano (ya no hablo de escenas…).
El choque cultural entre los ingleses y los lituanos es brutal y desternillante, y al mostrarnos diálogos en lituano sin subtitular, uno se siente tan perdido y desconcertado como los propios protagonistas, sin saber muy bien por donde nos van a venir las hostias en los próximos momentos.
El ritmo es constante y frenético, casi sin dejarnos respirar durante los cerca de 100 minutos de su metraje. La película es un continuo flipe, una ida de olla tremendamente divertida sin mayores pretensiones que la de sacar un buen de número de carcajadas al espectador. Ideal para pasarlo bien tanto solo sentado en el sofá, como acompañados de amigos y un puñado de cervezas.
El premio a la sucesión de imágenes más esperpénticas de 2014 creo que se lo lleva Redirected, con una amplia ventaja.
Puntuación: 7/10
Viale cine 